jueves, 22 de diciembre de 2011

Qué bonito recuerdo de ti. Mamá

Justo ahora comienza el fin, el fin de un año, el fin de algunos recuerdos y el fin de poder volver a estar contigo. Han de llegarme tantos recuerdos a la mente para esta fecha, anhelo aquellos días, en los que con emoción te preguntaba "¿a qué hora llega el niño Jesús?" buenos días aquellos, todos en familia reunidos. La hora de la cena, lo mejor. Sentarnos a hablar mientras comíamos, recordando aquello que nos sucedió durante el año. Luego para el día siguiente solo quedaba despertar y salir a presumir nuestros regalos. Después venía el último día del año, aquellos treinta y unos de Diciembre junto a ti, no los olvidaré jamás. Cuando sin saber lo que sucedía corríamos por la calle con aquellas grandes maletas, o cuando comíamos las 12 uvas. Que grandes recuerdos vivo de ti. 

Ahora, a pocos días del 24 de Diciembre, día en el que hace unos años atrás estabas junto a mi esperando que dieran las 12 de la noche para salir a buscar aquellos regalos. Ahora me siento, solo recuerdo aquello y dejo correr algunas lágrimas en tu nombre. Hoy, que ya no estás, que no te tengo junto a mi, me haces falta, y más en estos días donde lo único que puedo hacer es recordarte. Me gustaba verte alegre, sobretodo cuando emocionada me veías abrir los regalos, aquella imagen no la olvidaré jamás.

Cuando siento que ya no estás aquí para darme un abrazo de feliz navidad, llegas y sin saber como y me abrazas. Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, y que aunque no estés, te siento aquí, conmigo. Que aunque no te tengo cerca para decirte que te amo mientras te doy un abrazo de feliz navidad o de año nuevo sé que tu si me das un fuerte abrazo, sé que cada año va a ser uno más para solo recordarte, cada fin de año va ser uno más para celebrar que sigues viva en mi corazón, que te amo. Me haces falta todos y cada uno de los días del año, sólo porque no te puedo ver, pero aunque sé que estás aquí conmigo me encantaría poder tomarte de la mano mientras te veo a los ojos y darte las gracias por esos momentos perfectos que pasé contigo, por todas aquellas navidades en las que nunca me faltó un regalo, por aquellos treinta y uno de Diciembre en los que el mejor regalo era un abrazo tuyo y las palabras "que tengas un feliz año nuevo".

Hoy que a pocos días de navidad nos encontramos quiero dedicarle este escrito a la mujer de mis ojos, al amor de mi vida, a la única en quién sé que puedo confiar de verdad, mi madre. Que aunque no esté, sé que está y aunque no la vea, sé que me ve. 

Te amo mamá, gracias por aquellas navidades que junto a ti pasé.