sábado, 6 de octubre de 2012

Mi Hermosa Venezuela

A algunas horas del día más esperado por muchos Venezolanos, esperado por aquellos a los que le importa más su futuro, que su pasado. Me tomo la libertad de hacer llegar a ustedes, por medio de algunas palabras no tan vacías como otras, aquello que cada uno de nosotros ya debería tener bien claro.

Me atrevo a citar una frase que escribí en twitter hace algunos días atrás: Cuando aprendamos a ser ciudadanos, aprenderemos a elegir un presidente. ¿A qué me refiero con ésto? Pues a lo mal ciudadanos que estamos siendo cada uno de Nosotros, sin calificativos, sin señalar a algún partido o de derecha o de izquierda, me refiero a Nosotros. Cuando una persona exige un buen mandato ¿en realidad sabe lo que está exigiendo? Según mi parecer, un buen mandato consta de: una excelente autoridad, la cual, haga cumplir debidamente cada ley establecida en la constitución Venezolana. Un buen mandato construye buenas relaciones internacionales, no las destruye, gestiona a conveniencia de su país los recursos para cada estado, cada pueblo y, cada esquina que tiene debajo de su mando. Un buen mandato consta no solo de una buena gestión en el poder, sino de una buena participación del ciudadano ante su mandatario. Un buen mandato no se trata tan solo de aciertos, pues jamás se ha visto, ni creo que se verá, un mandato que haya sido totalmente perfecto, el buen mandato se trata, también, de errar, pero más que errar, se trata de saber solucionar estos errores y luchar cada día por una mejora popular. Un buen mandato no señala, no califica, no insulta, no promete. El buen mandato quiere a su pueblo como a una sola nación, lucha por el progreso, sabe como referirse, con respeto, hacia sus opuestos y por sobre todo, construye. En Venezuela, específicamente, no estamos listos para un buen mandato, nos caracterizamos por nuestra libertad, un buen mandato consta restringir y corregir ciertas cosas, por las cuales, Nosotros (y en mayúscula porque somos Nosotros el país de Venezuela) no estamos listos ni para reservar, ni para una corrección directa. Aquí necesitamos a alguien, que con el tiempo y amor a su patria, nos enseñe a que en un país, tan hermosamente rico en tantas cosas, debemos recuperar la pérdida de valores que nos ha ido descalificando entre nosotros mismos, por eso yo opto por el cambio.

Y sí, aún me faltan algunos meses para poder ejercer mi derecho al voto, pero por mi parte, amo a mi país y por ende, me tomé la libertad de dedicarle algunas letras, esto no es por algún candidato, esto es por Venezuela. ¡VOTA! Es tiempo de una mejora para Nosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario